Para demostrar que tienes un empleo podrás presentar distintos documentos tales como recibo de sueldo, monotributo o contrato laboral. También podemos considerar como sustento una carta o certificado laboral firmado por un jefe o representante de la empresa donde trabajes, con algún contacto para validarlo.
Una vez que inicies el proceso de admisión, asegúrate de contar con documentación respaldatoria ya que será solicitada en esta instancia.
Si no cuentas con alguno de estos documentos, escríbenos para que podamos ayudarte.